Teniendo en cuenta que la apagada analógica tendrá lugar en abril del 2010, la penetración de la TDT actualmente es bastante razonable, con un 45% de las viviendas. Sin embargo, no lo es tanto la cuota de pantalla que no llega al 27%.
¿Por qué? La razón palpable es que en la gran mayoría de los hogares usan la TDT para ver las cadenas tradicionales. El problema radica en otra razón, y es que estas cadenas ponen de manifiesto que sin publicidad no se puede hacer buena programación y, al mismo tiempo, los inversores publicitarios alegan que necesitan buenos programas para anunciarse.
Pero, lo que tenemos que resaltar es la diferencia entre España y el resto de Europa occidental respecto a la explotación de canales de pago. La media europea está por encima del 50% de los hogares, mientras que España no llega al 25%.
Frente a esto, el Ministerio de Industria ha tomado decisiones de aprobar la televisión de pago. Lo que se pretende con este decreto es impulsar la televisión digital en alta definición y dejar vía libre a los canales de pago en la modalidad digital terrestre, revitalizando así la oferta de contenidos en la TDT. Con ello, se intenta aumentar el número de programas de TV de pago españoles, que resulta muy inferior al de los países europeos más desarrollados.
¿Donde está el problema?, en la cantidad de descodificadores vendidos en los últimos años (17 millones para TDT) no están preparados para la TDT de pago e interactiva. Es decir, la TDT de pago es interactiva y esto quiere decir que necesita un canal de retorno para poder escoger los programas que se desean ver y poder efectuar los pagos. La gran mayoría de los descodificadores vendidos no poseen este canal de retorno y no podrán acceder a los canales de pago, de modo que la intención de aumentar la variedad del panorama televisivo y enriquecer las programaciones solo lo podrán disfrutar unos pocos.
Pero existen soluciones temporales, como es la propuesta por la empresa Dalia TV, que subvenciona dispositivos que funcionan con tarjetas de prepago.
Pero… ¿qué es el CANAL DE RETORNO?
Los servicios interactivos que la TDT es capaz de proporcionar: la consulta de cuentas bancarias, el voto en directo en concursos, la navegación por Internet, las compras telemáticas o confirmar el borrador de la Declaración de la Renta, entre otras gestiones. Sin embargo, son pocos los operadores televisivos que apuestan por desarrollar estas funcionalidades mayoritariamente desconocidas por el usuario.
Para acceder a estos servicios interactivos es imprescindible el canal de retorno y, debido a que la TDT no incorpora este canal en su estructura de red es necesario habilitarlo mediante otra tecnología que permita la conexión entre el usuario y los operadores. Es decir, con la TDT es posible recibir mejor señal de televisión, disponer de más canales y acceder a una serie de información multimedia pero para ello, si se quiere mandar una orden al televisor, es necesario un descodificador que incorpore un canal de retorno para que la señal que mandamos vuelva al televisor con la información deseada.
Estos descodificadores se les conocen como receptores TDT interactivos y son una alternativa a los descodificadores normales, con un precio mayor.